Niños y jóvenes buscan un futuro mejor

“Nuestro financiamiento se logra a través de beneficios que realizamos los padres; además tenemos el apoyo del comercio y la comunidad local, lo que siempre es importante” Soledad Contreras



En forma silenciosa, pero efectiva, un grupo de padres se dio a la tarea de ofrecer mejores perspectivas a sus hijos con diversos tipos de discapacidades en la comuna de El Tabo.
Con la angustia de no tener una entidad cerca de sus hogares que aportara efectivamente en la educación de sus niños, decidieron tomar cartas en el asunto y definitivamente hacer algo. No podían quedarse de brazos cruzados.
Así hace 5 años nació este Agrupación de discapacitados San Expedito de El Tabo que a poco andar ha logrado cosas importante en la enseñanza de niños especiales de la parte norte de la provincia de San Antonio.
Habían muchas dudas, mucha inexperiencia y en el fondo, mucha desorientación en torno a cómo enfrentar el futuro con niños, jóvenes y adultos con retardo mental.
¿Qué va a ser de ellos en el futuro? ¿podrán valerse por ellos mismos? ¿saldrán adelante?... eran sólo algunas de las inquietudes que los agobiaban.
Hoy esta agrupación privada sin fines de lucro, funciona en dependencias de la posta de El Tabo, con 30 personas con diversos niveles de discapacidad, como retardo mental en todos sus niveles, autistas y con síndrome de Down.
Allí desarrollan sus actividades a cargo de 6 especialistas que cubren todas sus áreas esenciales; equipo que es dirigido por Soledad Contreras.
“Este es un trabajo amplio y que surgió por la necesidad de tener un lugar donde los niños pudieran educarse y formarse para ser lo más independientes posible. Aquí trabajamos la prevención, la mantención y la rehabilitación de los jóvenes: además abarcamos la parte física, metal y por qué no decirlo, la parte espiritual también, porque aquí se dan cuenta de lo que pueden lograr por ellos mismos”, señala.
Junto con el apoyo social se enfatiza el desarrollo de talleres con los niños y jóvenes. “Tenemos talleres de carpintería, costura, repostería, deportes, música, entre otros. Recientemente hemos tenido una muy buena experiencia con el concertista en guitarra Milenko Glasinovic quien voluntariamente nos ha cooperado con el taller de Efecto Mozart en los niños. Ha sido una muy grata experiencia; personalmente no la conocía y puedo decir que nos ha dado muy buenos resultados, estamos sorprendidos”, señala Contreras.
¿En qué lo han notado?
En la atención con la que los jóvenes siguen las instrucciones mientras escuchan la música de Mozart. Tenemos el caso de una niña autista que puede seguir muy bien las instrucciones durante el desarrollo de ese taller.
Ese aspecto de la colaboración voluntaria es fundamental para ustedes…
Por supuesto. Tenemos varios colaboradores que han llegado a ayudarnos; uno de ellos es Milenko Glasinovic, pero también tenemos a otra persona que nos ayuda con las clases de baile. Pero contamos con el apoyo en otras áreas, como la que nos brinda Eduardo Vásquez, el tío encargado de la movilización; él sin tener una relación directa con nuestra problemática ha demostrado una especial espíritu de colaboración que ojalá se pudiera repetir.
¿Cómo es el apoyo de los padres?
Buena, hay que considerar que muchos de ellos llegan desesperados a nuestras puertas buscando una ayuda; después de conocer como trabajamos y ver los avances de los niños, se comprometen con nuestra labor.
¿Qué proyectos tienen a futuro?
Como se puede ver el recinto donde estamos ya se ha quedado chico. Hemos ganado proyectos de Chiledeportes y del Fondo Social Presidente de la República, por lo que tenemos una muy buena implementación, pero lamentablemente esta casa nos quedó chica. Este es un comodato del municipio, pero corresponde a la posta de El Tabo y tengo entendido que ellos se van a ampliar, así es que debemos buscar en el corto plazo otro lugar donde instalarnos.
¿Lo ven posible?
Es complicado, pero debemos hacerlo sí o sí, ojalá pudiéramos tener más apoyo en esta labor, por el bien de nuestros chicos.